Un loco se ha escapado de un manicomio. En su deambular sin rumbo entra en un local. Se celebra allí un concurso de catadores de vino...
El hombre pide a los presentes lo dejen participar... le ven la facha, sabiendo que no está en sus cinco sentidos el organizador del concurso se dirige a él diciéndole:
-Tu, hombre sin razón , qué puedes ofrecernos a quienes aquí estamos?
- Toma una copa de vino y retírate por favor, para seguir con este concurso El hombre toma la copa... prueba el vino y empieza a declamar, atrayendo la atención de todos, diciendo:
"De entre sus secretos, sin parámetros la vendimia sustrae tu imagen para ponderarla en la superficie curva de las perlas negras que recojo y pruebo.
Y su dulce zumo me transporta en su sabor, a tu recuerdo, entre su color te veo... haciendo malabares con tus ojos, suaves ojos de enredadera, que en espiral sostenían mi alma... cuando me amabas... y tu piel dormía en la mía arrullándose con los besos que la lluvia Le destinaba al follaje, nuestra voz se confundía entre el barullo de la tarde intentando hacerle una broma al día con nuestras sombras... mostrando solo una silueta... y tu infalibilidad, tu certeza, sorprendían a los soles que nos observaban desde el cielo: cuando friccionabas con tu cuerpo la fragilidad geométrica y la tierra se bebía el vino, todo!!! embriagándose contigo... Ahora este olor exótico remueve mi instinto bajo el ala del crepúsculo. Bendita vendimia...
Maldita vendimia!!! Ignominiosa, perenne... Qué dolor el no tenerte...! Silenciosamente te alejaste...! Pero ella, inconsciente me macera el corazón al mostrarme vivo tu recuerdo...!"
Los presentes se sorprenden, la emotividad y memoria del "loco" dejó un agradable sabor en el paladar del alma... así como una duda inmensa... luego se retiró serenamente del lugar...
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